Tengo pendiente para el verano un ciclo completo con las películas de Sánchez Arévalo. Quiero volver a verlas todas e invitar a Erik, que ya tiene edad a verlas con nosotros. Nathaly y yo nos hemos reído mucho viéndolas.
Cuando terminé de ver "Primos" recuerdo que pensé que hubiera sido buenísimo tener un par de primos para formar un trío calavera como el de la peli. Más por edad que por distancia, no fue posible.
Gracias al whatsapp y a tu llegada he recuperado el contacto con algunos de ellos, en especial con la prima Lidia, a la que recordaba siendo una niña, más pequeña que mi hermana y que, como mi hermana, ya es toda una mujer.
Sé que la prima Lidia se alegró muchísimo de tu llegada y sé que le hubiese gustado mucho estar en tu bautizo, pero tenía que trabajar. Lástima que no pudiese presumir de la maravillosa tarta que te hizo y que, con gran cuidado y sacrificio, la tita Paqui consiguió llevar casi intacta hasta el Rocío.
Por edad, más que por distancia, mi pequeña prima y yo hemos hablado y nos conocemos menos de lo que me hubiese gustado. Me cuentan que es muy, muy trabajadora y sé que es una excelente cocinera. Ojalá que un día se anime, y si ese es su sueño, termine de aprender algún truquillo entre fogones; y la ilusión y las fuerzas le alcancen para montar un pequeño restaurante.
La prima Lidia te regaló estas galletas como recuerdo de tu bautizo. Sé que están hechas con todo el amor del mundo. Algún invitado las probó; seguro que, además de preciosas, están buenísimas; pero mamá y yo preferimos guardar las nuestras para que te queden de recuerdo. Muchas, muchas gracias, pequeña prima.
La próxima vez que vayamos a Lucena y nos encontremos con la prima Lidia seguro que tiene alguna galleta para que podamos probarlas y ver los buenas que están.
No hay comentarios:
Publicar un comentario